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La caja negra ya es una realidad dentro del mundo de los coches. Desde el pasado 6 de julio, todos los automóviles nuevos que se comercialicen en la Unión Europea tendrán que contar con este dispositivo.
En realidad, su nombre es Event Data Recorder (EDR) o Grabador de datos de acontecimientos. Pero se le ha bautizado como caja negra por su similitud con la que llevan los aviones. Y se estima que, con ella, en los próximos 15 años se evitarán más de 25.000 muertes y unos 140.000 heridos en carretera.
Este dispositivo electrónico se encarga de recopilar todos los datos del vehículo y de sus ocupantes, y de grabarlos en caso de accidente. Gracias a ello, permite conocer todo lo sucedido en el coche antes, durante y después del siniestro.
En concreto, registra todos los datos del automóvil, aunque solo graba cuando recibe información de un accidente. Y lo hace desde 30 segundos antes hasta 5 después del hecho.
Asimismo, reconoce y graba 15 variantes. Entre ellas, por ejemplo, la velocidad y las revoluciones del motor, la frenada o el funcionamiento de sistemas de seguridad como los cinturones o los airbags.
Gracias al EDR y al resto de sistemas de seguridad del automóvil, se espera que la Unión Europea se acerque al objetivo de cero muertes en carretera para el año 2050.
Curiosamente, este dispositivo no es de color negro, sino naranja para que sea bien visible en caso de accidente. Tiene el tamaño de un teléfono móvil y se coloca bajo el asiento del conductor, atornillado al chasis del vehículo.
No graba imágenes ni sonido, sencillamente dispone de un chip que registra todos los datos citados. Específicamente, se activa cuando salta el airbag y siempre que el coche esté arrancado. A partir de ese momento, como decíamos, graba los 30 segundos anteriores y los 5 posteriores a un accidente.
Para extraer estos datos se conecta el propio puerto de la caja o el puerto OBD del automóvil a la terminal de diagnosis del ordenador de un taller.
Por otra parte, el acceso a la información de la caja es restringido. No todo el mundo puede verla, ni siquiera los talleres, aunque sean concesionarios oficiales. Solo las autoridades de tráfico tienen acceso a sus datos en su misión de reconstruir un siniestro.
En cuanto a los automóviles que ya están obligados a incorporar el EDR, son todos los de clase M1 (hasta 8 plazas incluyendo la del conductor) fabricados desde el pasado 7 de julio.
También tendrán que llevarlo los del segmento N1, incluso furgonetas y camiones que estén por debajo de los 3500 kilogramos de peso.
No, la información que guarda este dispositivo es anónima. No incluye datos personales del conductor ni la identificación del vehículo. Por tanto, su misión es clarificar las causas de un accidente para que no se repitan.
Comauto Sport es concesionario oficial de Abarth, Fiat, Fiat Professional, Alfa Romeo y Jeep, y taller oficial de Lancia, Chrysler y Dodge en la provincia de Castellón. Igualmente, ha colaborado con A Punt Televisió para crear un reportaje con el que dar a conocer el EDR.
De esta forma, Comauto, además de ofrecer a sus clientes los mejores vehículos de estas marcas, así como coches de ocasión y servicio postventa, contribuye a que se conozca mejor la nueva caja negra de los automóviles
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